¿Por qué?
Recientemente, la consultora especializada en estudios y monitoreo de mercado Nielsen dio a conocer los resultados de su estudio The Global, Socially-Conscious Consumer. El objetivo es saber qué tan sensibilizado está el consumidor respecto a los productos y servicios amigables con el medio ambiente (o ecofriendly) y las marcas sostenibles.
De acuerdo con el estudio, 46% de los 28 mil encuestados (de 56 países) dijo estar dispuesto a pagar más por un artículo o servicio que apoyara una causa ambiental o social. Y ¿quiénes son estos consumidores socialmente responsables?
Se trata de jóvenes (entre los 24 y 35 años) que sienten afinidad por aquellas acciones que impacten positivamente a sus comunidades o ecosistemas. Es gente informada y que basa en parte su decisión de compra en los comentarios que las redes sociales arrojen de las marcas y la experiencia de compra.
En ese sentido, una buena idea de negocio es ofrecer productos elaborados a partir de insumos reciclados y que, además, contribuyan a mejorar una situación social, ambiental o animal. Por eso, la propuesta es el diseño y venta de camas ecológicas para mascotas.
¿Cómo?
Existen varios materiales que se pueden aprovechar para el diseño de una cama ecológica para mascotas. Por ejemplo, hay modelos fabricados a base de cartón reciclado –con la ventaja de que soporta hasta 120 kilos de peso–, aparatos eléctricos vintage o en desuso –rellenos de almohadas y cobijas–, entre otros.
“En el caso de hamacas para gatos la producción es de $130.00 e incluye materiales (madera de pino y piel sintética) y mano de obra”, señala Marloes van Beveren, Directora de Hamacat.
La venta directa por hamaca tiene un costo de $449.00. En el caso de Hamacat, la empresa ofrece la opción de envío al interior de la República con un costo extra de aproximadamente $150.00. “Además, por cada venta se donan $50.00 al refugio para gatos en situación de calle Huellitas Enlodadas”, concluye Marloes.
0 comentarios:
Publicar un comentario