Los trenes de alta velocidad, literalmente, puede causar dolores de cabeza. Es por eso que Japón limita su nivel de ruido de contaminación aceptable, que puede ser especialmente alto cuando los trenes salen de los túneles. Mientras conducen a través de la presión de aire se acumula en las ondas y, cuando la nariz se desprende, puede producir un trueno-escopeta como oído de un cuarto de milla.
Eiji Nakatsu, un ingeniero de la observación de aves en la compañía ferroviaria japonesa JR-West, en la década de 1990 se ha inspirado en el martín pescador, un ave se alimenta de peces que crea apenas un murmullo cuando dardos en el agua en busca de una comida. La nariz del tren rediseñado - un 50 pies de largo de acero pico del martín pescador - no acaba de resolver el problema del ruido; que reduce el uso de energía y permitió una mayor velocidad.
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